La pérdida de uno o más dientes tiene serias consecuencias en nuestro estado de salud general, afectando a nuestro bienestar y vida social.
Influye en nuestro aspecto, condiciona nuestros gestos, nuestra sonrisa y hasta la manera en la que hablamos y pronunciamos.
La ausencia de dientes complica nuestra alimentación, nos impide comer ciertos alimentos y puede tener como consecuencia digestiones pesadas y otros muchos problemas digestivos.
Consecuencias de la pérdida dentaria:
- Movilidad en los dientes vecinos y los antagonistas, creando zonas que son más difíciles de higienizar.
- Caries en dientes vecinos.
- Problemas de mordida.
- Pérdida del hueso donde antes se encontraban esos dientes, ya que se reabsorbe como consecuencia de la pérdida, condicionando el tratamiento que decidamos hacer en el futuro, entre otras.
Los pacientes se preguntan cual es la mejor manera de reparar el daño ocasionado por las pérdidas dentales.
¿Puentes dentosoportados o implantes?
Los puentes dentales son la unión de varias coronas o fundas que apoyándose sobre los dientes adyacentes a la o las pérdidas sustituyen de manera artificial los dientes perdidos.
Para la realización de este tipo de prótesis es necesario preparar o tallar los dientes adyacentes para que el asentamiento y ajuste del puente sea correcto.
Al hacer esto, estamos tratando dientes sanos, eliminando parte de su esmalte, lo que puede tener consecuencias negativas como por ejemplo la sensibilidad de estos dientes o la pérdida de resistencia de los mismos.
Los implantes dentales son un tratamiento que consiste en sustituir de manera artificial la raíz del diente perdido.
Se coloca en el lugar de la pérdida dental. Después de aproximadamente 3 meses, el implante se fija al hueso de manera que podemos colocar una corona que se ajusta perfectamente a la forma, tamaño y color de los dientes naturales sin necesidad de tratar los dientes vecinos.
Los implantes dentales se pueden utilizar tanto para sustituir pérdidas unitarias como múltiples, colocando dos o más implantes, lo que se denomina puente sobre implantes. Esta opción llega incluso a permitir la reposición completa de todo el maxilar o mandíbula. Además tienen una tasa de integración cercana al 100% siendo una técnica segura y predecible.
En Fuencoro buscamos una solución individualizada teniendo en cuenta las diferentes variables de cada caso.
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